La noche del jueves 27 de abril en el Café La Palma comenzó con Maquiladora que, tras cinco discos, venían a Madrid a presentar los temas de su último EP The gulf (Acuarela, 2006). Quizá por el cansancio, el mal sonido de los instrumentos o miles de razones más, los tres miembros del grupo, los cuales intercambiaban sus instrumentos en cada canción, cumplieron con su deber, intentando dar al público lo mejor de sí mismos, pero el resultado no fue demasiado gratificante. Objetivamente, el sonido fue muy poco sólido y el ambiente de la sala estuvo bastante revuelto (la parte de atrás de La Palma era un constante hervidero de voces que no callaban), aunque bien es cierto que un sector del público parecía bastante satisfecho con las canciones de los californianos.
Maquiladora
Tras la actuación de Maquiladora, llegó el turno de The Strugglers. Era la segunda vez que los de Carolina pisaban los escenarios de Madrid (el año pasado su cantante actuó en solitario en la sala Siroco), en esta ocasión para mostrar los temas de su tercer álbum You win (Acuarela, 2005). El concierto comenzó con Rejection letter y Racing down one path, los dos primeros temas de su nuevo disco. Esta vez sí, la guitarra y la voz de Randy Bickford, acompañado por una excelente pianista (que, con sus notas graves, también hacía las veces de bajo) y un sencillo batería, consiguieron que el público permaneciese más atento a la música de este trío. Tras una complicación con la afinación de la guitarra, el show continuó con Cascade range y un par de temas nuevos, uno de ellos con un ritmo más alegre al que la banda nos tiene acostumbrados, y para terminar el concierto, una preciosa balada de piano y voz con algunos detalles de guitarra, que incluyó una larga parte instrumental y que sonó emotiva y perfecta para cerrar la actuación del grupo.
The Strugglers
Más allá de las circunstancias antes señaladas, Maquiladora no llegó a convencer demasiado. Todo lo contrario ocurrió con el siguiente grupo: las melodías de Blickford, con su voz siempre grave y melancólica, consiguieron cautivar al público de la sala. Quizá hubo una única pega: fue un concierto demasiado corto. La que escribe hubiera deseado que el primer grupo hubiese cedido algunos minutos más a The Strugglers.
Texto y fotos: Ana F.
