El quinteto irlandés de post punk The Murder Capital debutaba hace más de tres años con When I Have Fears, un álbum surgido apenas después de nueve meses de vida de la banda, por lo tanto todavía con la idea en mente de dejar una huella genuina dentro de la nueva (y abundante) hornada de grupos de post punk, sobre todo del Reino Unido. When I Have Fears fue, además, un grito desgarrador de dolor, grabado después del suicidio en febrero de 2018 del amigo de la banda, el poeta y músico Paul Curran y, tal vez por esa connotación de desánimo, el disco no logró demasiada repercusión entre los medios, aunque la que hubo fue entusiasta y tampoco le fue mal en las listas de su país. La formación, sin embargo, ha ido perfeccionando su sonido en los últimos años y se ha tomado un tiempo prudencial para publicar un sucesor, tres años y medio después. En Gigi´s Recovery los teclados han ido adquirido más protagonismo, transformando su post punk inquietante en un electro mucho más oscuro- que, sin embargo, aún se transforma en guitarras angustiosas y arrebatadoras como en Crying– y la enérgica y vehemente voz de su cantante, James McGovern, parece haber encontrado mayor peso, como en la hipnótica The Stars will Leave their Stage, que parece recoger influencias de Nick Cave.
Como ellos mismos han corroborado, si su primer álbum era una mirada al pasado, el nuevo- un disco que, con todo, continúa siendo introspectivo- tiene más que ver con mirar hacia el futuro y superar un trauma. Así, parece ser que el personaje de ‘Gigi’ es una metáfora de la resiliencia y la curación. En el caso de The Murder Capital, la ‘convalecencia’ significó reducir un estilo de vida de exceso en el que la banda se había arrastrado en el camino. El grupo pasó un tiempo escribiendo y grabando en Wexford, un pueblo pesquero en el sureste de Irlanda, de cuyos frutos la compañía discográfica, a priori, se manifestaba inicialmente incómoda: “Esto va en una muy buena dirección pero…habéis establecido un nuevo estándar para la depresión…'» fue su contestación. Esa no parecía realmente la determinación inicial de la banda, que, sin embargo, durante seis meses en Londres, gracias a la energía de la ciudad, atenuó el pesimismo del álbum y potenció el ritmo que aquellas canciones podían necesitar, para después grabarlo con John Congleton en el famoso estudio La Frette de París. Definitivamente Gigi´s Recovery no es, de nuevo, un álbum directo y accesible ni pretende crear masas de admiradores. Pero es un segundo álbum- el siempre complicado segundo disco- del que la banda irlandesa, pese a tanto las iniciales suspicacias propias como las del sello una vez grabado, ha sabido salir airosa.
