[Reseña] Jon Batiste – WE ARE
Dice Jon Batiste que su papel como activista y músico se difuminan en uno, caminan siempre juntos. Lo cierto es que Batiste ha estado involucrado en los movimientos por los derechos civiles e incluso el verano pasado marchó en las protestas de Black Lives Matter, antes de tocar en un concierto especial en el Barclays Center en la ciudad de Nueva York. Al mismo tiempo su reconocimiento como músico ha llegado recientemente por su trabajo con Trent Reznor y Atticus Ross en la composición de la banda sonora de la película Soul producida por Disney y Pixar, con un Globo de Oro y con bastantes posibilidades de obtener el Premio de la Academia en la misma categoría.
El concepto de su nuevo disco de estudio, WE ARE, le ha llevado un proceso de siete años de escritura junto a su compañero músico Marcus G. Miller, antes de finalmente grabar en los Electric Lady Studios. El trabajo adicional se pospuso hasta finales de 2019 debido al clima social y político general de los últimos años, además de su ocupación ccomo líder de la banda y director musical de Stay Human de The Late Show With Stephen Colbert. El proyecto inicial se grabó en una sesión de seis días con la compositora Autumn Rowe y el productor Kizzo en el camerino de Batiste en el Teatro Ed Sullivan, anteriormente el camerino de Carol Burnett.
«Los ingredientes esenciales para este álbum»– comenta Miller «se reunieron entonces: el deseo de llevar la esencia del jazz más allá de su audiencia tradicional». Por eso WE ARE es una amalgama de soul, jazz, R&B, rap y gospel en el que se presenta a Batiste tocando 12 instrumentos diferentes junto a artistas como Quincy Jones, Zadie Smith, PJ Morton, Trombone Shorty, su padre Michael Batiste y su abuelo David Gauthier. En ese intento de sintetizar todas sus fuentes en un álbum contemporáneo, las influencias de todos los que han contribuído a hacer emblemática la música afroamericana en los últimos 60 años se palpan desde los primeros minutos como James Brown o Booker T. (Tell the truth), Al Green (Cry), Sly Stone (Freedom) o Marvin Gaye (Sing) y se combinan con esa habilidad, ya demostrada en la citada banda sonora, de imaginar soul, jazz y swing envueltos en todo tipo de estilos bien zarandeados en ritmos enloquecidos como en Whachutalkinbout, reunidos en un entorno épico como la canción titular- que además incorpora los sonidos que Batiste capturó durante las protestas en Nueva York- o las armonías ligadas a Nueva Orleans y su cultura, especialmente en el cierre Until, que integra a los indios de Nueva Orleans cantando Shoo Fly. Así WE ARE es una declaración honesta de intenciones y también una foto fija de un momento determinado que confirma a Jon Batiste como uno de los grandes abanderados del soul más comprometido.