En este año en el que el post punk ha regresado en una nueva eclosión desde el Reino Unido en bandas como Black Midi o Black Country, New Road, en su versión más experimental, no hay que olvidar, que, al igual que en otros estilos, hay otros países donde pueden surgir propuestas tan o incluso más interesantes que las que ahora, sólo circunscritas a este movimiento, están en boca de todos, y a las que no se les presta tanta atención.
Tras su ep Crack Cloud, la formación natural de Vancouver NOV3L ha sacado a la luz un álbum de debut contundente. La banda se identifica vehemente como anticapitalista, una declaración personal que se inocula en las intenciones artísticas de su primer disco, una incursión política que analiza las manifestaciones de injusticia e inseguridad colectiva de la actualidad. “El siglo XX ha dado lugar a una generación transitoria cuyos años de formación se han dedicado a participar en el surgimiento de una Red indescifrable y las etapas iniciales de una transformación en la humanidad (…) ¿Qué tipo de comunidades y relaciones estamos construyendo? ¿Cómo queremos influir y dar forma al futuro? «
Escrito entre 2017 y 2020 en la casa de alquiler de la banda en Vancouver, demolida poco tiempo después, el LP debut de N0V3L encuentra a la banda adoptando las modas y paletas sonoras del post-punk- más cercano al dance punk– y la new wave de los años 70 y 80, una visión nostálgica y, al mismo tiempo, actual. Respaldadas por líneas de bajo sombrías y lentas, guitarras frenéticas, y saxo penetrante, a veces con elegantes líneas de teclados como en Status o Stranger, las letras de Jon Varley – voz personal y monocromática- dibujan una estampa gris del presente, desde el desarrollo de las grandes farmacéuticas paralelo a la adicción a los opiáceos (Pushers), la salud mental (Group Disease «Obsesionado con los patrones en medio de la locura / Un deseo de sentido, una búsqueda de equilibrio») o la especulación inmobiliaria que ellos vivieron en sus propias carnes (Notice of Disclusore; «adaptación forzada, aviso de ejecución hipotecaria / Arrastrándonos hacia adelante, un futuro indiferente») y teje un álbum consistente de post punk rudo y, a la vez, asombrosamente refinado- ellos lo definen como una «discoteca macabra capitalista tardía»– uno de los más completos de los surgidos en los últimos meses.
