Repasamos la lista de libros más vendidos y alguna de las novedades de esta semana.
En el apartado de ficción de la lista de libros se incorpora en el quinto puesto el tercer libro de la saga de literatura fantástica Canción de hielo y fuego de George R. R. Martin, titulada Tormenta de espadas (Gigamesh). En el apartado de no ficción irrumpen Gente tóxica (Ediciones b) de Bernardo Stamateas y El poder del ahora (Gaia) de Eckhart Tolle. Más novedades hallamos en el apartado de poesía: Crisótemis (Acantilado) de Yannis Ritsos, Perros románticos (Acantilado) de Roberto Bolaño y la Antología poética (Austral) de Miguel Hernández.
Entre las novedades, Escritores delincuentes (Alfaguara) de José Ovejero. «Quien es capaz de escribir un gran libro no se merece estar entre rejas. Eso debieron de opinar Cocteau y Sartre cuando defendieron a Genet, y tantos otros intelectuales que, a veces sin conocer bien los hechos delictivos de sus protegidos, se lanzaron a una cruzada para liberarlos.
No me considero inmune a la fascinación por los fuera de la ley. ¿Burroughs mató a su mujer jugando a Guillermo Tell? ¿Álvaro Mutis estuvo en la famosa cárcel de Lecumberri por malversación? ¿Anne Perry fue una adolescente asesina? Quizá, al principio me empujaba sobre todo una curiosidad algo morbosa. Pero los escritores seleccionados no son interesantes sólo por su biografía. Lo verdaderamente interesante es la relación entre ésta y su obra, cómo en ambas se entrelazan temas como la culpa, las injusticias sociales, la capacidad redentora —o no— de la escritura, la verdad en la ficción, la mentira en la autobiografía, la relación con la propia violencia, su mirada sobre la cárcel, sobre los jueces, sobre otros delincuentes, la impresionante tensión entre lo que dicen y lo que callan… El libro del escritor delincuente se vuelve una nueva sala del tribunal, y el lector el jurado o, en algún caso, un nuevo acusado como miembro de esa sociedad a la que condena el delincuente. En pocas ocasiones une la literatura de forma tan consciente a escritor y lector, no sólo mediante el acto literario, también a través de la confrontación entre sus valores y opiniones.» José Ovejero Primeras páginas
Salvajes (Planeta) de Don Winslow.Traductor: Alejandra Devoto. Ben y Chon son dos tíos que saben disfrutar de la vida: les encanta el sexo, el voleibol, la cerveza y las chicas. Ophelia, más conocida como O., tiene fama de alcanzar orgasmos muy escandalosos (por eso sus amigas a veces la llaman Multi O.) y está loca por Ben y Chon. En fin, que se acuesta con ambos. Pero lo que de verdad hace diferentes a Ben y Chon de los demás es que producen la mejor maría del mundo. ¿Algún problema? Ninguno. Bueno, sí, uno: el cartel de Baja. La esencia del narcotráfico mexicano. Que, además, está compuesto por unos tipos con muy malas pulgas: o les das lo que desean o te cortan la cabeza. Son auténticos salvajes. Y ahora, vaya por Dios, tienen secuestrada a O. porque quieren la hierba de Ben y Chon. ¿Qué hacer? Solo hay tres salidas:
1. Hacerles el juego.
2. Encontrar y rescatar a O.
3. Pagar veinte millones de dólares.
Después de El poder del perro y El invierno de Frankie Machine, Don Winslow regresa con una novela dura, directa y sin concesiones. Un lenguaje sin florituras en el que no sobra una sola palabra. Una increíble combinación de suspense llena de adrenalina, crímenes feroces y el lado oscuro de la guerra contra las drogas. Una novela brutal. «Salvajes elevará de golpe a Winslow a otro nivel […] sus bromas son tan ingeniosas; sus personajes, tan geniales, y la narración, tan despiadada que los riesgos merecen la pena, gracias, sobre todo, al sentido del humor sin cuartel de Winslow». The New York Times
Viajes para mitómanos (Laertes) de José Manuel Alonso Ibarrola.Este libro es una caprichosa selección de escenarios recorridos por el autor a lo largo de treinta años en calidad de periodista y escritor de viajes. La selección tiene un denominador común: Son rutas sugerentes, diversas, fuera de los circuitos tradicionales, idóneas para quienes consideren que viajar puede ser algo más que una distracción: una emoción. Para aquellos que, admiradores de un escritor, un cineasta, un músico o un pintor, quieren evocar los escenarios donde transcurrieron sus vidas y los personajes de sus obras. Es decir, para quienes se consideren, como el autor, mitómanos, fetichistas o cualquier otra «extravagancia» que convierte sus viajes en algo personal e inolvidable.
José Manuel Alonso Ibarrola (San Sebastián, 1934). Escritor y periodista. Su actividad literaria oscila entre la literatura de humor y la de viajes, a la que se ha dedicado en los últimos años. Colaborador asiduo en prestigiosas publicaciones periódicas, ha recibido galardones de los gobiernos italiano y francés por sus trabajos periodísticos. Está considerado uno de los pioneros en la promoción de “rutas culturales”.
Mildred Pierce (RBA) de James M.Cain. La mayor tragedia de Mildred Pierce no es el haber nacido en el seno de una familia de clase media sin excesivos recursos. Ni siquiera el haberse casado con el hombre equivocado, de quien necesariamente debe separarse si no quiere hundirse en la miseria con él. Incluso el tener que salir adelante sola con un trabajo precario podría ser algo relativamente fácil de llevar. El mayor peso que Mildred Pierce debe cargar sobre sus espaldas es su hija Veda, ambiciosa e ingrata, dispuesta a aprovechar el esfuerzo ajeno en beneficio propio. Pero su ya de por sí complicada relación se irá tornando cada vez más nociva y asfixiante, a medida que Mildred prospere en la vida y comience a ganar un dinero que Veda no dejará de menospreciar y dilapidar. Una dramática novela que retrata la lucha diaria de una valiente mujer en los años de la Gran Depresión. Un alegato al trabajo, el esfuerzo y la tenacidad que miles de mujeres tuvieron que demostrar en los Estados Unidos para ganarse un sitio en una sociedad que las relegaba a un segundo plano. Kate Winslet protagoniza la mini serie que ha dirigido Todd Haynes (Far from Heaven) y que ha recibido 21 nominaciones para los premios Emmy.
Crónicas de Nueva York (Alfabia) de Maeve Brennan. Prólogo y traducción de Isabel Núñez.«Nosotros, neoyorquinos corrientes, éramos reyes y señores en todos esos lugares, aun en aquellos en que el dueño fingiera ser hosco o en los que lo fuese realmente. Podíamos elegir y encontrar nuestros restaurantes favoritos y disfrutar de una de las maneras de sentirnos en casa en esta ciudad. Es en la vida cotidiana, buscando restaurantes, tiendas y un lugar donde vivir, cuando encontramos nuestra vía para entrar en la ciudad. Y hay que encontrar una vía propia en Nueva York. Porque no es una ciudad hospitalaria. Es muy grande y no tiene corazón. No es encantadora. No es simpática. Es agitada, ruidosa y descuidada, es un lugar duro, ambicioso e irresoluto, no muy animado, y nunca alegre. Cuando relumbra, es muy muy brillante, y cuando no brilla, está sucia. Nueva York no hace nada por aquellos de nosotros que nos sentimos inclinados a amarla, excepto implantar en nuestro espíritu una morriña que nos confunde hasta que nos alejamos de ella, y entonces comprendemos por qué sentimos inquietud. En casa o lejos, sentimos añoranza de Nueva York, no porque Nueva York fuese mejor ni peor, sino porque la ciudad nos posee y no sabemos por qué».
En Crónicas de Nueva York, Maeve Brennan nos ofrece certeras y evocadoras viñetas de la vida neoyorquina en los 50 y los 60, revelando al lector las mil caras fugaces de esta fascinante ciudad, todas las pequeñas historias sin nombre que palpitan en su seno, las pequeñas alegrías y tragedias que transitan sus calles y que ella, no en vano admirada por escritores como John Updike o Alice Munro, supo captar como nadie.
En la serie Mildred Pierce Winslet está perfecta, consigue hacer olvidar aquella cara de asco permanente que tenía en la soporífera Titanic. Una actriz que va a más.