Los libros de la semana
Hay tres novedades en el apartado de ficción de los libros más vendidos: Bajo la misma estrella (Nube de tinta) de John Green, La cocinera de Himmler (Alfaguara) de Franz-Olivier Giesbert y La vida era eso (Destino) de Carmen Amoraga, Premio Nadal de Novela 2014. Por otro lado, en no ficción entra Matar a Prim (Planeta) de Francisco Pérez Abellán.
En cuanto a las novedades, Albertine desaparecida (Salamandra) de Marcel Proust. Durante el verano y el otoño de 1922 Proust llevó a cabo modificaciones finales en el manuscrito de «Albertine desaparecida». Excepto para contados contemporáneos su hermano Robert, Jacques Rivière y Jean Paulhan, este hecho habría quedado ignorado. Gracias a un providencial concurso de circunstancias fue posible, en 1986, redescubrirlo. Claude Mauriac, casado con una sobrina de Proust, descubrió un texto dactilografiado lleno de tachaduras y adiciones, así como páginas manuscritas de Proust, lo que cambiaba radicalmente la obra. Su nieta, Nathalie Mauriac, se ocupó de la edición del manuscrito. Los proustianos constatarán, con emoción, que el propio Proust deseaba que la última versión de «Albertine desaparecida» fuera más breve, más densa de la que se disponía hasta la fecha. Mediante ciertos retoques, añadidos, supresiones, variaba el sentido del libro inyectándole estos «átomos de verdad» que acrecientan el rigor de una composición y le proporcionan su perfil definitivo. Si en 1925 no le fue posible al profesor Proust editar la «verdadera» Albertine desaparecida, ahora ya es posible leer la última versión de una obra maestra. Traducción: Javier Albiñana.
Cuentos de la gran guerra (Alpha Decay). Esta antología reúne veinte relatos publicados a lo largo de los veinte años que siguieron al inicio de ese conflicto civil europeo que, hasta el período de 1939-1945, se llamó la Gran Guerra. La selección se restringe a la producción literaria en lengua inglesa, con relatos de escritores de los países anglófonos que combatieron junto al Reino Unido y el resto de los aliados. La recopilación busca ofrecer un panorama de la «trinchera literaria» de quienes vivieron el conflicto y reflejar la multiplicidad de posturas y reacciones ante la guerra.
Los autores antologados son: Arthur Machen, Rudyard Kipling, Vernon Lee, Ellen Newbold La Motte, Saki, Wyndham Lewis, Arthur Conan Doyle, Joseph Conrad, Lord Dunsany, Edith Wharton, Herbert Read, Swarna Kumari Devi, D.H. Lawrence, Mary Butts, Catherine Mansfield, William Somerset Maugham, Mary Borden, James Hanley, Richard Aldington y Radclyffe Hall. Edición a cargo de Juan Gabriel López Guix .
En la calle del alquimista (Thule/colección Micromundos) de Franz Kafka. Este escritor es el gran inaugurador del género del microrrelato. Bajo este título ofrecemos por primera vez reunidas las microficciones del escritor, y con ello continuamos completando nuestra gran biblioteca de microficción. Esta obra recopila los dos libros de textos breves publicados por el autor en vida (Contemplación y Un médico rural) más los que quedaron inéditos a su muerte en sus diarios. Nuestro título evoca la calle donde Kafka escribió, desde 1916, la mayoría de sus textos breves. Estos textos, de una condensación genial, constituyen el más claro precedente del género de la microficción y han servido de inspiración a generaciones de escritores.
Una casa de tierra (Anagrama) de Woody Guthrie. La única novela de Woody Guthrie, concluida en 1947 e inédita hasta el momento, es un crudo retrato del «Dust Bowl» norteamericano que, con sus tormentas de arena y su pertinaz sequía, agravó los devastadores efectos de la Gran Depresión de los años treinta. Con el lirismo y la autenticidad de las canciones del genial trovador folk, narra la historia de Tike y Ella May Hamlin, atrapados en unas condiciones económicas muy penosas, incapaces de pagar sus facturas o de ganar poco más que un dinero de subsistencia. Marido y esposa viven en una precaria chabola de madera en las áridas tierras de una granja de Texas y, como tantas otras parejas, sueñan con una vida mejor y buscan el amor y el sentido en un mundo corrupto. Tike anhela sobre todo una casa sólida que los proteja de los traicioneros elementos y, gracias a un folleto publicado por el Departamento de Agricultura del gobierno, aprende cómo construir una sencilla vivienda de adobe, edificada con sus propias manos y a prueba de fuego, de viento y de sequía. Una casa de tierra. Sin embargo, los campos en los que Tike y Ella May viven y trabajan no son suyos y debido a fuerzas que escapan por completo a su control, como los conglomerados de rancheros y los bancos, esa casa de adobe quedará dolorosamente lejos de su alcance.
Una casa de tierra, con su realismo rural y su activismo progresista, constituye en buena medida una pieza pareja a «This Land Is Your Land», el himno folk compuesto por Woody Guthrie. Es también una conmovedora evocación de Estados Unidos por uno de sus grandes artistas, un relato sobre la adversidad y la esperanza con el trasfondo de un paisaje natural y social devastado, en el que se aúnan la urgencia moral de John Steinbeck y la franqueza erótica de D. H. Lawrence.«Guthrie se describía a sí mismo como una “máquina de esperanza”. Cuando soñaba, soñaba con fuerza, y así les ocurre también a los protagonistas de su novela, Tike y Ella May Hamlin, unos aparceros que viven acosados por las tormentas de arena, la sequía y las deudas y mantienen alta la moral con grandes esperanzas, animadas conversaciones y mucho sexo» (Michel Faber, The Guardian).