Cine, Tv y Teatro

La película de la semana: Mujercitas

Enésima adaptación del clásico de Louisa May Alcott y, para algunos críticos, es la mejor de todas.

Mujercitas ha sido contado en el cine en numerosas ocasiones. Las dos primeras versiones datan del cine mudo (1917 y 1918), de tal forma que, en la segunda, incluso algunas escenas fueron filmadas en la propia casa de la escritora, que había fallecido treinta años antes, en 1888. En 1933 Katharine Hepburn hizo el papel de Jo March en la película dirigida por George Cukor. La cinta se presentó en el Festival de Cine de Venecia en el 34 donde la actriz ganó por la mejor actuación femenina y el director obtuvo una nominación para la Copa Mussolini. Los guionistas Sarah Y. Mason y Victor Heerman ganaron, por otro lado, el Premio de la Academia al Mejor Guión Adaptado.

En 1949 Elizabeth Taylor y Janet Leigh protagonizaron la versión de Mervyn LeRoy, que fue una de las más taquilleras del año, aunque sólo se llevó un premio a la mejor dirección artística. En 1994 se hizo una nueva versión, esta vez con Winona Ryder y Susan Sarandon, dirigida por Gillian Anderson. Esta vez sí hubo más nominaciones, aunque sin premios, las de Mejor Actriz para Winona Ryder, Mejor Diseño de Vestuario para Colleen Atwood y Mejor Banda Sonora original para el compositor Thomas Newman.

Después de la versión televisiva de la BBC con Emily Watson en 2017, esta enésima revisión dirigida por Greta Gerwig, e interpretada por Saoirse Ronan- nuevamente con la directora después de la nominada al Oscar Lady Bird– Emma Watson, Florence Pugh y Eliza Scanlen. Curiosamente Emma Watson, que interpreta a Meg, la mayor de las hermanas, sustituyó a la prevista Emma Stone, que ya tenía otros compromisos. Precisamente fue Stone la que hizo lo propio con Watson en La La Land y ganó el Oscar por dicho papel.

La película, que se desarrolla en Harvard, Massachusetts, es una adaptación bastante fiel a la historia original, ambientada en Nueva Inglaterra durante la Guerra Civil estadounidense, además de los propios escritos de la autora del siglo XIX. Según Gerwig, la historia de las hermanas March es «atemporal y actual al mismo tiempo».

Según Empire «cálida pero nunca deslucida, acogedora sin ser cursi, esta es una excelente adaptación de la fuente y una prueba más de que Gerwig es el producto auténtico». Para TIME «con su adaptación cinematográfica, Gerwig vuelve a bordar y refuerza esa tranquilidad tácita. Al igual que Alcott, lidera con el ejemplo: ha hecho una película compleja y reflexiva, pero que también, en todo momento, puro placer». Según The New York Times la ventaja de la directora es que no nos da todo hecho, porque «como cualquier buen novelista y todo gran cineasta, Gerwig no tiene miedo de dejar que su audiencia trabaje un poco. Ella confía en nuestra inteligencia y nuestra curiosidad, y también en su propio dominio del medio». Para Vulture «Mujercitas de Gerwig exigen que sus espectadores reconsideren estos personajes familiares y lo que siempre asumimos que representaban. No solo rebosa de vida, rebosa de ideas sobre felicidad, realidades económicas y lo que significa empujar o responder a las expectativas establecidas para el género». Según Time Out «a veces funciona como una comedia (…) Sin embargo, es la actitud visionaria de Alcott, bien rematada por Gerwig, la que permanece contigo durante más tiempo: la soledad de la libertad femenina» .Finalmente, para Washington Post «en las hábiles manos de Gerwig, incluso los contornos más familiares de Mujercitas se sienten nuevos, no porque tenga la temeridad de redefinir la obra maestra de Alcott, sino porque la replantea sutilmente».

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