No podía estrenarse en nuestro país con mejor presentación: Siete flamantes Globos de Oro.
La película de Lions Gate Entertainment Corp. se llevó la estatuilla de mejor película, musical o comedia, en la ceremonia que tuvo lugar este domingo en Beverly Hills, California, presentada por Jimmy Fallon. Ryan Gosling ganó por su papel como Sebastian, el pianista de jazz , mientras que Emma Stone consiguió el Globo de Oro por su interpretación de la joven actriz Mia. Con sus siete premios, La La Land batió los records previos de Alguien voló sobre el nido del cuco (1975) y El Expreso de Medianoche (1978), con seis premios cada uno.
La La Land ganó en cada categoría en la que fue nominada. Damien Chazelle obtuvo los galardones de dirección y guión; el compositor Justin Hurwitz ganó por la mejor composición de Banda Sonora, así como la mejor canción original, con los letristas Benj Pasek y Justin Paul , por City of Stars. [+ sobre los ganadores de los Globos de Oro 2017]
Pocos conocen que Damien Sayre Chazelle comenzó en 2009 con un musical de jazz titulado Guy and Madeline on a Park Bench, con banda sonora también compuesta por Justin Hurtwitz, cinta filmada en 16mm en blanco y negro, que ya en su momento fue muy apreciada por la crítica y que no se llegó a estrenar en España. Con otra cinta sobre jazz, Whiplash, Chazelle obtuvo tres galardones de la Academia,entre ellos mejor actor secundario, aunque no los principales de Mejor Película y Banda Sonora a los cuales también optaba.
Lo cierto es que hacía tiempo que una película- un musical en concreto- no había puesto tan de acuerdo a crítica y público, y sobre todo a la crítica, que valora la cinta como sobresaliente, en su mayor parte. Para Time Out London «La La Land es una bestia rara: una película para adultos que no es kitsch, una broma o una película de Bollywood. En todo caso, es una oda bellamente elaborada al gusto de Jacques Demy de Los paraguas de Cherburgo y Cantando bajo la lluvia de Stanley Donen». ReelViews lo tiene claro: «La La Land no es sólo el mejor musical hecho para la pantalla grande en mucho tiempo, es posiblemente el mejor musical (no animado) cinematográfico desde La pequeña tienda de los horrores de 1986. Sí, es más vibrante que Chicago, más sincera que Les Miserables, y más exitosamente llevada a escena que el coro de otros contendientes». Para The Telegraph «La La Land quiere recordarnos lo hermoso que pueden ser los sueños medio olvidados de los viejos tiempos: los que se componen de nada más que caras, música, romance y movimiento. Tiene como dirección las estrellas, y durante poco más de dos horas maravillosas, te elevará allí también». Para Washington Post «La verdadera estrella de La La Land es la película en sí misma, que pulsa y resplandece como una cosa viva por derecho propio, como si los musicales de MGM de la era de Cantando bajo la lluvia tuvieran un hijo fruto del amor con las confecciones más abstractas de Jacques Demy».
