Se estrena una de las películas más esperadas del año, la tercera del aclamado director de cine, guionista y diseñador de producción Robert Eggers.
Con dos películas excelentes a sus espaldas, The Witch de 2015 y The Lighthouse de 2020, el interés en el próximo proyecto de dirección de Robert Eggers ha sido más que lógico. El hombre del norte/The Northman, un drama de venganza vikingo del siglo X, finalizó la producción en diciembre de 2020 tras un largo y tortuoso rodaje de siete meses. Su protagonista, Alexander Skarsgard, aseguró que «física y mentalmente, el trabajo más difícil que he tenido… los días eran realmente largos y duros, y estábamos en el barro, y en las cimas de estas montañas con el viento y el frío». Lunto con Skarsgard, Anya Taylor-Joy vuelve a trabajar con el director, al igual que Willem Dafoe, mientras que Nicole Kidman, Ethan Hawke, Claes Bang, Kate Dickie, Ralph Ineson y Bjork completan el impresionante reparto.
La fascinación de Eggers, que se inició con un viaje a Islandia y un encuentro fortuito con el propio actor protagonista, partía del hecho de que no había demasiadas películas de vikingos o al menos «auténticas películas» sobre vikingos. Si bien es en parte cierto, el interés de Hollywood por las hazañas de los pueblos nórdicos procedentes de Escandinavia se remonta a los primeros tiempos del cine. De hecho, The Viking, de 1928, fue el primer largometraje en technicolor que contó con banda sonora y fue considerada la mejor de la cinematografía en color en el momento de su estreno. Y si seguimos echando la vista atrás, encontramos que Hollywood ya le había echado el ojo a la saga de Ragnar Lodbrok y sus hijos con el libro The Viking de Edison Marshall para rodar The Vikings en 1958, protagonizada por Kirk Douglas, con el posterior remake en la película franco italiana Erik the Conqueror, tres años después. The Vikings resultó incluso ser un enorme éxito de taquilla y dio lugar a la serie de televisión Tales of the Vikings, dirigida por el editor de la película, Elmo Williams. Seis años más tarde se filmó The Long Ships, con Richard Widmark y el recientemente fallecido Sidney Poitier, aunque no lograría los mismos frutos. Islandia, por derecho propio, también ha intentado llevarse el gato al agua con el cine autóctono y seleccionó hasta tres películas de temática vikinga en la categoría de Mejor Película Extranjera, la primera en 1981, con Outlaw: The Saga of Gisli, en 1984 con When the Raven Flies y, finalmente, en 1988 con A la sombra del cuervo, pero ninguna de ellas llegó a ser escogida entre las finalistas por la Academia. En 2009 se estrenó Valhalla Rising, película danesa dirigida por Nicolas Winding Refn, coescrita por Refn y Roy Jacobsen, y protagonizada por Mads Mikkelsen y, aunque la película consiguió críticas positivas, solamente logró recaudar una ínfima parte —cerca de 31 mil dólares— de los 5,7 millones de dólares que costó su producción, por lo que seguramente muchos directores tomaron buena nota… salvo Robert Eggers. El director supo del hecho de que Shakespeare basó Hamlet en un antiguo cuento popular nórdico sobre un príncipe llamado Amleth. Fue el punto de partida para crear esta historia de venganza y mitología para la que se rodeó, en su mayor parte, por el mismo equipo de The Witch y The Lighthouse, incluido el director de fotografía Jarin Blaschke, el diseñador de producción Craig Lathrop y la diseñadora de vestuario Linda Muir.
En cuanto a la crítica, aunque en general muy favorable, hay para todos los gustos. Para Los Angeles Times «al igual que sus memorables películas de época, aunque en una escala mucho más ambiciosa, es a la vez una deslumbrante muestra de destreza cinematográfica y una astuta remodelación del género, una película que se deleita en cumplir con ciertas convenciones mientras convierte otras en sus cabezas ingeniosamente cortadas». Según Empire «esta es una narración íntima y culturalmente rica en una escala brutalmente épica. Skarsgård está en su elemento, reforzado por un elenco sensacional que se lanza de cabeza a la impresionante visión de Eggers y Sjón.Una saga cinematográfica digna de los antepasados». Para The Guardian «The Northman es una historia terriblemente violenta, nihilista y caótica sobre el ciclo interminable de violencia, la elección entre amar a tus amigos y odiar a tus enemigos, que resulta no ser otra opción, y el hilo del destino por el que gotea la deliciosa toxina de la masculinidad. Es completamente escandalosa, con algunas visiones épicas del cosmos en llamas. No podía apartar la mirada». Para Variety, sin embargo, «En la mayoría de los aspectos, Eggers es un artista único con ideas sólidas y singulares sobre cómo escribir, poner en escena y marcar el ritmo de sus películas (…) The Northman carece del elemento sorpresa que hizo que «La bruja» y «El faro» se sintieran como clásicos instantáneos». Finalmente, afirma The Film Stage «con un fuerte sentido de autenticidad e intención, El hombre del norte está diseñada para desconcertar y repeler. En un amplio panorama de lanzamientos de entretenimiento vaporoso y fácil de complacer, tales hazañas deben celebrarse».
