A punto de cumplirse 10 años de su fallecimiento, se estrena, a través de HBO, el documental de Martin Scorsese sobre George Harrison.
Harrison murió el jueves 29 de noviembre de 2001 en la ciudad de Los Ángeles con 58 años. George Harrison: Living in the Material World, que fue lanzado en DVD al mismo tiempo que fue estrenado en HBO, dura tres horas y media. En el documental aparecen amigos de Harrison como Paul McCartney, Ringo Starr, George Martin, Eric Clapton, Tom Petty y Eric Idle, y cuenta además con declaraciones de Yoko Ono o Phil Spector. Scorsese recibió para documentarse, de la viuda del músico, Olivia, un archivo de videos caseros, fotografías nunca vistas y grabaciones perdidas de Harrison. La cinta de Scorsese se divide en dos partes: una primera que documenta sus años de fama y otra en la que se aborda una etapa posterior en la que alternaba la música con trabajos filantrópicos y una carrera como empresario en la industria musical.
La crítica es unánimemente positiva, aunque con matizaciones: «En contraste con otros trabajos profundos de Scorsese, como The Last Waltz, en George Harrison: Living… parece como quedarse muy en la superficie..» (New York Daily News). «El documental tiene mucho que contar, particularmente en las dos últimas horas, cuando la honestidad de Olivia Harrison contribuye poderosamente a terminar de dibujar el retrato de un artista más interesante de lo que muchos de nosotros hubiese pensado…» (Philadelphia Daily News). «Este puede ser un trabajo mejor [que No Direction Home], por la profundidad de su sentimiento y su temática relativamente más próxima y reconocible» (Los Angeles Times). «Pero en lo que los 209 minutos del film ponen especial énfasis es la idea de que el público puede haber subestimado al viejo compañero de clase de Paul (…) que tomó una dirección en la vida más diverso e inusual que el resto de sus compañeros…” (Hollywood Reporter). «El propósito básico del film es dar la cara por Harrison y de su necesidad fuera de modas y sin pretensiones de aportar un propósito espiritual a su música y su vida: el film de Scorsese sugiere que, en solitario en los Beatles, y en primera línea después, fue una auténtica figura espiritual…” (The Guardian). «Revela un caleidoscopio de perspectivas que sigue fascinando y confundiendo a sus admiradores después de su muerte. Para Scorsese el proyecto le ha permitido sumergirse en la vida de un artista que, como él, nunca descansaba» (New York Times). «Harrison fue quizás la estrella espiritual más explícita y consistente del último medio siglo. Mientras que él no pudo convertir a todos a sus creencias, sí que empujó a ello a sus compañeros y a sus fans, animando al público a abrirse a las nuevas (o muy viejas) influencias espirituales…» (The Huffington Post).
