La leyenda del cine francés tenía 94 años.
Michel Piccoli saltó a la fama gracias a Le Mépris de Godard (1963), en el que formó una pareja legendaria con Brigitte Bardot . La popularidad del actor aumenta después de su interpretación de Dom Juan en una adaptación televisiva de Marcel Bluwal en 1965. Durante los años cuarenta conecta con los roles de seductores, dando repetidamente la respuesta a Catherine Deneuve en La Chamade o Benjamín, el despertar de un joven inocente (gran éxito público en 1967) o incluso Belle de jour de Luis Buñuel. Con este último, mantendrá una larga colaboración cinematográfica iniciada en 1956 con La Mort en ce jardin, seguida en particular de las películas Le Journal d’une femme de chambre (1964), Belle de Jour (1967), Le Charme discret de la bourgeoisie ( 1972), oscar a la mejor película extranjera, o El fantasma de la libertad (1974).
Le siguen papeles diversos como en La Grande Bouffe (1973), la película escandalosa firmada por Marco Ferreri, entonces un hombre enamorado de una muñeca inflable en la naturaleza de Grandeur, The Jump in the Void y Une étrange affaire, dos papeles que le valieron un precio de interpretación, el primero en Cannes en 1980, el segundo en Berlín en 1982. A partir de los años 90, dará a los jóvenes autores una oportunidad y continuará paseando por un cine de autor exigente, sin olvidar a los grandes como Berlanga (Paris Tombuctú, 1999) o Jacques Rivette (La Belle Noiseuse, 1991). Su último papel importante fue el del Papa en Habemus Papam (Moretti, 2011).
