El cantante y compositor creó numerosas canciones para Edith Piaf y otros artistas durante los años 60s. Tenía 95 años.
Nacido en Cahors en 1929, Charles Dumont estudió en Toulouse, pero no tuvo éxito fácilmente. Deslumbrado por las inspiraciones de Louis Armstrong, decidió, en su adolescencia, seguir una carrera como músico. Con apenas 15 años fundó su primera orquesta de jazz y, con el paso de los años, enriqueció sus interpretaciones musicales. Este último pronto será recompensado en el Conservatorio de Toulouse.
El joven se trasladó entonces a París, con el sueño enterrado de poder hacer carrera pero tuvo que dejar la trompeta tras una operación de amigdalas. Sin embargo, tras entrar en una iglesia, conoció al maestro Paul-Sylva Hérard. Este último, teclista, aceptó dar lecciones al joven desesperado y poco después, Charles Dumont se convirtió, a su vez, en teclista.
A principios de los años 1960, Charles Dumont comenzó a componer canciones para diferentes cantantes, sin revelar su verdadero nombre. Escribe, entre otros, para Gloria Lasso, para Tino Rossi e incluso para Dalida. No fue hasta 1960, con la canción Non, Je Ne Regrette Rien que coescribió con el letrista Michel Vaucaire, que se alcanzó el éxito. El título, interpretado por la cantante Édith Piaf, llamó inmediatamente la atención del público. Una colaboración fructífera que dará fruto a más de treinta títulos, si sólo citamos Mon Dieu, Flonflons du bal o incluso Les amants. Este último, coescrito por Charles Dumont y Édith Piaf, también fue cantado a dúo por los dos artistas en 1962.
Además de Édith Piaf, Charles Dumont colaboró con numerosos artistas a lo largo de los años 1960. Trabajó, entre otros, con Jacques Brel en 1964 para el título Je m’en res à toi, con Mireille Mathieu para Les gens qui s’aiment, mon Dieu, o incluso con Chantal Câlin por Une femme de 40 ans. A finales de los años 1960, con la muerte de Edith Piaf, Charles Dumont inició una carrera en solitario y realizó trabajos para televisión y cine, incluidas las bandas sonoras de Les Aventures de Michel Vaillant en 1967, Trafic en 1971, así como Parade en 1974. También grabó varias álbumes, como Une chanson (1976), Les Amours Impossibles (1978) y Les mots d’amour (1981).
