Fallece Benito Peinado, vocalista de Dulce Venganza
La banda sevillana fue una de las pioneras de la nueva escena musical española a principios de los 80s.
Dulce Venganza se formó hacia 1982 con Benito Peinado (voz) y Julio (guitarras). El nombre lo habían tomado del álbum Sweet Revenge (1978) de Amanda Lear, una de las reinas de las pistas de bailes europeas del momento, adelantándose a Alaska y Los Pegamoides, en el nombre, que estos hubiesen querido bautizar a su nuevo grupo en ciernes, obligándolos a llamarlo, finalmente, “Dinarama”. En 1983 entran a los Estudios Pañoleta Records (Sevilla) para editar para el sello Dro su primera grabación, un Maxi titulado Quiero matar a una chica que incluía además del tema que da nombre al titulo Tengo un hipopótamo en mi bañera y Enséñame a bailar y también son incluidos en el disco recopilatorio de la compañía de Servando Carballar, Después del Holocausto, junto a los grupos KGB, 091, Decibelios, entre otros, con su principal tema Quiero matar a una chica. En 1984, ve la luz un trabajo nuevamente para Dro, que titulan Sadomasodiscoshow, con dos sencillos extraídos: Tú y yo / Tú y yo (remix) y Sado maso disco show / Dunas. Posteriormente sacaron cuatro LPs: Los Tortuosos Senderos Del Amor (Tuboescape Records), Hippy Hop, Strip-Tease y Vida & Color (todos con Mano Negra Records). Hace unos meses Peinado presentó Las pistas perdidas de Dulce Venganza, las canciones que la banda grabó en 1993 y permanecían inéditas hasta ahora, en un disco LP de vinilo serigrafiado, al que acompañaba también el libro Las cosas nunca son como uno quiere que sean.