El músico recupera a su banda para una gira por nuestro país el próximo año.
Dean Wareham no necesita presentación. Galaxie 500, Luna, Dean & Britta. Al frente de esas tres formaciones se ha convertido en un personaje emblemático del indie pop. Empezó a serlo ya a finales de los 80 y así hasta el día de hoy, porque su trayectoria es tan pionera como vigente. Lo de pionera, claro, es por Galaxie 500, uno de esos grupos influyentes que todo el mundo cita. Haciendo un paralelismo con el tópico que se soltaba sobre The Velvet Underground, puede decirse que Galaxie 500 no coleccionaba millones de fans, pero cada uno de los que tenía formaba una banda. Solo así puede entenderse la fuerte huella que en los años 90 dejó su música -ensoñadora y enigmática, de intensas atmósferas- a decenas de formaciones del shoegaze y el slowcore. Un legado que sigue calando en nuevas bandas de la radiante actualidad, léase Real Estate o The Clientele. Con la llegada de 2011, Wareham sacará a la carretera las canciones que hicieron de Galaxie 500 todo lo que se ha dicho en las cuatro frases anteriores. Un repertorio que si se publicará ahora por primera vez seguiría impactando igual. Una prueba del algodón, esta crítica aparecida en Pitchfork: «Cuando las nuevas bandas tocan música de guitarras con mucha reverberación y tempos lentos -una combinación que envuelve las melodías en una sublime y drogada neblina de pop onírico- me suele costar engancharme a ellas. No porque no se esté produciendo hoy suficiente buena música de ese estilo, sino porque una banda, Galaxie 500, veinte años atrás, hizo esos sonidos tan bien y con tanta personalidad que d ejó el listón muy alto y difícil de igualar para los recién llegados».
De momento no se han confirmado fechas oficialmente, aunque extraoficialmente ya se ha apuntado el 22 de febrero en la sala Wah Wah en Valencia.
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