Anoche marcó la última actuación de su residencia en Múnich, donde tocó durante 10 noches a lo largo de agosto en el estadio Messe München, con capacidad para 80.000 personas, construido especialmente para este fin, en Alemania. Era su primera visita por Europa desde 2016.
Durante su último espectáculo en Múnich anoche, Adele reflexionó sobre los últimos años de espectáculos en directo. “No soy la intérprete más cómoda, lo sé, pero soy muy buena en eso. Y he disfrutado mucho de actuar durante casi tres años, que es el tiempo más largo que he hecho y probablemente el más largo que haré”, dijo. Actualmente tiene 10 shows restantes en su residencia de Las Vegas después de que se pospusieran a principios de año debido a una enfermedad. “Después de eso, no los veré durante un tiempo increíblemente largo”, le dijo a la multitud. “Los llevaré en mi corazón durante todo el tiempo que dure mi descanso y fantasearé con estos shows y con cualquier show que haya hecho en los últimos tres años”.
Mientras luchaba por contener las lágrimas, Adele concluyó su discurso diciendo: “Ha sido increíble, solo necesito descansar. He pasado los últimos siete años construyendo una nueva vida para mí y quiero vivirla ahora”.
