Cine, Tv y Teatro

American Utopia: primeras impresiones

Se estrena en HBO la adaptación cinematográfica a cargo de Spike Lee del aclamado espectáculo de Broadway de David Byrne.

El interés del músico por el teatro viene de muy atrás. Byrne quedó impresionado por el teatro experimental que vio en la ciudad de Nueva York en la década de 1970. La producción de Broadway, que se inauguró en octubre de 2019 y se desarrolló hasta el 16 de febrero de este mismo año en el Hudson Theatre, cuenta con el cofundador de Talking Heads acompañado por 11 músicos de todo el mundo interpretando canciones del álbum de Byrne de 2018, American Utopia, su primer trabajo en 14 años, así como algunos de los éxitos de su ex formación Talking Heads y de sus ocho discos en solitario o los cuatro colaborativos con Brian Eno o St Vincent. La producción de Broadway contó con el trabajo de la coreógrafa Annie-B Parson y Alex Timbers como asesor de producción, quienes previamente colaboraron con Byrne en el (fallido) musical Here Lies Love– también álbum con Fatboy Slim– sobre la ex primera dama de Filipinas Imelda Marcos.

«Spike y yo nos hemos cruzado muchas veces a lo largo de los años, obviamente soy un gran admirador y ahora finalmente tenemos la oportunidad de trabajar juntos», dijo en su presentación Byrne. “Estoy absolutamente encantado con el resultado. El espectáculo de Broadway fue un desafío maravilloso, así como una oportunidad: fue un placer actuar y, bueno, mejor dejar que las citas hablen por sí mismas. Encantado de que este programa y los temas que aborda ahora lleguen a un público más amplio».

En el caso de su principal protagonista, el listón de documental ya estaba bien alto. American Utopia llega 36 años después de Stop Making Sense de Jonathan Demme, que documentó tres conciertos que los Talking Heads hicieron en el Pantages Theatre de Hollywood en 1983 para promocionar su álbum Speaking in Tongues. La película fue la primera realizada íntegramente con técnicas de audio digital y hoy es considerado por gran parte de la crítica como el mejor documental realizado sobre una actuación en vivo. Un documental cuyo prestigio fue, además, fundamental para el comienzo del período de mayor éxito de ventas de Talking Heads, que llegaría con sus dos siguientes trabajos, Little Creatures (1985) y True Stories (1986). Algunas de las canciones de esta etapa de la banda- en realidad True Stories fue realmente un musical dirigido por el propio Byrne- aparecen de nuevo en el documental. En el caso del director, Spike Lee, también tenía experiencia previa en el género, ya que llevó a la gran pantalla en 2009 otra obra de Broadway, Passing Strange.

En la escena de apertura, Byrne, solo y con un traje gris azulado, reflexiona sobre un modelo de cerebro humano y habla sobre la importancia de conectarse con la comunidad global. Además de varias versiones, los números musicales incluyen revisiones completas de canciones de su último álbum, como Everybody’s Coming to My House, así como un repaso de la discografía de los Talking Heads como I Zimbra, Slippery People, Born Under Punches (The Heat Goes On), Blind, Burning Down the House o Once in a Lifetime, de su álbum Remain in light, que justo hace unos días cumplía 40 años.

Según Vanity Fair «American Utopia es una destacada colaboración entre dos artistas imprescindibles; no puedo creer que haya nadie vivo que no se sienta conmovido por este documento. La carrera de Byrne es un testimonio de nunca dormirse en los laureles, de buscar siempre la expansión creativa, pero más que nada, American Utopia demuestra lo electrizante que sigue siendo como intérprete. Está igual que siempre». Según Hollywood Reporter «la sinergia aquí entre el cineasta y el protagonista, desde los ritmos de avant-funk hasta el espíritu de inclusión y la necesidad de curar una nación rota, es simplemente espectacular». Para Vulture «si tu mente se ha abierto, aunque sea un poco, cuando American Utopia termina, eso es un testimonio de lo que el arte presentado públicamente puede hacer y por qué su ausencia se siente tan profundamente en este momento». Entertainment Weekly sostiene que el documental sobresale porque «la mano de Lee en todo esto parece ser liviana; aparte de su íntimo pero discreto trabajo de cámara, el espectáculo parece esencialmente intacto con respecto a la actuación en vivo». Para New York Times «algunos espectáculos teatrales filmados mueren en la pantalla por pura falta de energía visual e invención. Lee, un maestro del arte, utiliza la plasticidad del cine para complementar esta producción, dándole vida en dos dimensiones».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba