¡Buenas noticias! El creador de joyas de la comedia animada más irreverente como Padre de Familia, Padre Made in USA y The Cleveland Show, se ha pasado al cine y eso hay que celebrarlo a lo grande.
Con Ted, Seth MacFarlane nos cuenta la increíble historia de un niño sin amigos que una Navidad pide que su osito de peluche cobre vida. Bajo esta premisa tan entrañable el director y guionista realiza un auténtico despliegue de originalidad, descaro y carcajadas que rara vez podemos disfrutar en nuestros cines. Con el siempre solvente Mark Walberg en el papel del amigo/dueño del osito Ted en su edad “adulta” y la fantástica Mila Kunis como la novia de éste nos encontramos con un gran entretenimiento que sobresale de la comedia romántica más canalla haciéndonos reflexionar sobre cuántos de nosotros seguimos aún con el maldito síndrome de Peter Pan y si debemos abandonarlo o no.
Pero todo no van a ser halagos. Si algo hay que reprochar al debut de MacFarlane en la gran pantalla es que, al fin y al cabo, la película no es más que una adaptación de cualquiera de sus series: Un personaje que no debería adoptar actitudes humanas. Así el osito Ted podría ser perfectamente el perro Brian de Padre de Familia o el alienígena Roger de Padre Made in USA. Pero bueno, ¿qué quieren que les diga? Si algo funciona mejor no tocarlo, ¿verdad?
Ah! Antes de irme un último consejo: no me sean tan perezosos como el firmante y desplácense donde haga falta para disfrutar del VOSE. Esto es totalmente necesario para disfrutar el film en su plenitud ya que el doblaje de Santi Millán es algo más que sonrojante -cuando se dará cuenta este personaje que hace mucho que perdió la gracia – mientras que en la versión original es el propio MacFarlane quien le presta la voz al oso de peluche más crápula que jamás existió.
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