Sudoeste 2005 (Zambujeira do Mar, del 4 al 7 de agosto de 2005) Parte II
Domingo 7 de agosto
Situémonos, último día del festival en el escenario grande. A medida que vayan pasando las horas se irá recrudeciendo el discurso, pero para empezar lo mejor es recurrir a otra banda británica insustancial que se asienta entre el pop simpaticón de Travis y el pop llorón de Coldplay, depende de si hablamos de su primer álbum o del que han editado este mismo año, respectivamente. Auténtico pasto de quinceañeras, Athlete cumplieron con dignidad aunque el público ya estaba más pendiente bien de acabar el fin de semana, bien de guardar fuerzas para Doves, Dinosaur Jr. o Korn. Destacaremos la épica que destila Wires, el ritmo simple pero efectivo de Shake those windows o el morbo de escuchar El Salvador que te deja con el poso de duda ¿quién copió a quién? ¿Athlete a Avril Lavigne en su Complicated? ¿Acaso al revés?
Difícil, comentábamos entre nosotros, llevar al directo las composiciones de los mancunianos Doves. Tal vez por ello el trío cuenta en esta gira con un teclista. Sin embargo, las canciones no pierden matices más allá de algunos arreglos esperados y evidentes. Comenzaron con Pounding, una de las favoritas, para seguir con temas del aclamado The last broadcast (Heavenly, 2002) y del más reciente Some cities (Capitol, 2005), como White and black town, Snowden o Almost forgot myself. Jimi Goodwin agradeció la asistencia del público confundiendo Portugal con España, lapsus que le causó cierto nerviosismo según confesó minutos después. Para terminar, The cedar room y su mejor tema, There goes the fear, donde Jimi, en la parte final, deja el bajo e introduce más percusiones para el peculiar y sorprendente final de la canción.
Había ganas de ver la vuelta de Dinosaur Jr. y lo cierto es que no defraudaron. J Mascis (cantante y guitarrista), Lou Barlow (bajista) y Murph (batería) ofrecieron un concierto donde primaron sus temas más conocidos como Freak scene o Little fury things. Situados cerca del foso, casi en piña y con los altavoces prácticamente encima, el grupo consiguió un sonido brutal (en casi todos los sentidos), dominado por los desarrollos largos y con especial protagonismo de los solos de un Mascis que se presentó en chandal. Buen regreso.
Con la carpa casi abarrotada saltaron al escenario Alison Mosshart (voz y ocasional guitarra) y Jamie Hince (voz y guitarra). Sus respectivos pseudónimos, para que todo resulte menos soporífero, son W y Hotel respectivamente, es decir, The Kills. Lo primero que nos encontramos fue a Hotel con la guitarra y ocupado en hacer sonar las baterías y arreglos que faltan. A su lado, Alison daba vueltas durante unos minutos alrededor del escenario. Muy cool o, como alguien perspicazmente comentaba, las vueltas tal vez le sirvieran para saber cuando entrar a cantar en el karaoke que llevan en directo. Si en el estudio todavía disimulan algo sus carencias – en el nuevo No wow (Rough Trade/RCA, 2005) ya algo menos -, en directo se convierten en un espectáculo poco digerible: no encontramos melodías, los ritmos grabados y repetitivos cansan y aburren, tienen poca presencia y una actitud de risa. Pese a todo, y como hemos dicho anteriormente, la carpa Planeta Sudoeste estaba casi llena y el disfrute, aparentemente, fue colectivo.
Textos: Jorge García y Fco. J. Fdez.
Fotos: Sergi Serrano y Fco. J. Fdez.