60 años sin Charlie Parker
Uno de los solistas más influyentes en el jazz, y una figura central en el desarrollo del bebop en la década de 1940.
Parker vivió la música desde niño: se mudó de niño a Kansas City, Missouri, que era un centro importante de la música afroamericana en los años 1920 y 1930. Parker tuvo sus primeras lecciones de música en las escuelas públicas locales; comenzó a tocar el saxofón en 1933 y trabajó ocasionalmente en grupos semi-profesionales antes de salir de la escuela en 1935 para convertirse en un músico a tiempo completo.
Se mudó a Nueva York en 1939 y a partir de 1940 es cuando ya empieza a aparecer por primera vez en la prensa musical. Sus primeras grabaciones están basadas en el swing, y al mismo tiempo revelan su extraordinario don para la improvisación. En diciembre de 1942, se unió a la big band de Earl Hines, que entonces incluía a varios otros jóvenes como Dizzy Gillespie.
En diciembre de 1945, él y Gillespie llevan el nuevo estilo de jazz a Hollywood. Forma un quinteto (con Miles Davis, Duke Jordan, Tommy Potter, y Max Roach) que grabó muchas de sus obras más famosas. Los años 1941-1951 fueron período más fértil de Parker, a pesar de sus problemas con la droga – enganchado a ella desde los 15 años- y el alcohol.
En julio de 1951, la licencia de cabaret de Parker fue retirada a petición de la brigada antinarcóticos durante un período de dos años. Su salud mental y física, por culpa de su adicción, así como sus problemas económicos fueron cada vez mayores, incluso en dos ocasiones intentó suicidarse en 1954. Su última actuación pública fue el 5 de marzo de 1955, en Birdland, en un club nocturno de Nueva York nombrado en su honor. Murió siete días después en Nueva York, el 12 de marzo de 1955.